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Acorazados y cruceros de batalla del siglo XX

ACORAZADOS DREADNOUGHT, O MONOCALIBRE


Los acorazados partícipes en la II Guerra Mundial eran los barcos de guerra por excelencia. Artillados con piezas que oscilaban entre los 280 mm y los 460 mm, y cuya protección de acero podía llegar hasta 400 mm de espesor máximo. Eran auténticas moles de acero, con desplazamientos monstruosos.

Las transformaciones que sufrieron todas las marinas hasta llegar a estos barcos, fueron vertiginosas. Tras la batalla de Tsushima entre Rusia y Japón, allá por 1905, se demostró que los mayores daños habían sido provocados por la artillería de grueso calibre. 
Esto promovió una corriente dentro de las marinas más potentes del momento, que dio lugar al acorazado Dreadnought, primer acorazado monocalibre, construido en 1906 por la marina británica.

Con anterioridad, los acorazados, que eran los barcos más potentes del momento, montaban artillería de diverso calibre para armar sus cañones más potentes. Entre los calibres nuevos, se encontraban los de 305 mm, con la carencia de tiro mejorada, los de 152 mm, 203 mm, 233 mm, 254 mm.....toda esta diversidad de calibre implicaba una  munición diferenciada para cada cañón y que las piezas de uno no valían para el resto. La distancia de enfrentamiento entre los barcos iba en aumento, lo que favorecía aún más el empleo de cañones más grandes, con de más alcance. 
Estos barcos monocalibre, se caracterizaban por tener una sola medida en sus cañones de grueso calibre, e igualmente un único calibre para su armamento secundario, los cuales se empleaban en la corta distancia y para defenderse de ataques de buques más rápidos y pequeños, como destructores o torpederos.

En lo que se refiere al aparato motor, se optó por turbinas de vapor en lugar de los ya sobrepasados motores alternativos. Las turbinas ofrecían mayor rendimiento y además alcanzaban como mayor rapidez  velocidad. Eran realmente máquinas más ligeras y simples, necesitando menos medios humanos.

Los nuevos acorazados monocalibres dejaron obsoletos a todos los acorazados anteriores. En su diseño, montarían la artillería de grueso calibre en torres, principalmente en proa y popa, para poder disparar por ambas bandas, y utilizar toda la potencia de fuego tanto a babor como a estribor. Dejando así de un lado la artillería secundaria montada en casamatas. El Dreadnought montaba 10 cañones de 305 mm, pudiendo utilizar de 6 a 8 cañones según la dirección.


Acorazado Dreadnought
Ciertamente, el Dreadnought no fue el primer barco diseñado como monocalibre. La flota japonesa ya tenía buques con este diseño puestos en grada, pero debido a problemas con los suministros de cañones de 305 mm,  y otros de índole económica, estos buques no fueron terminados como estaban proyectados.

Uno de los precursores del Dreadnought fue el Primer Lord del almirantazgo británico John Fisher. A principios del siglo XX, la armada británica era la más potente del mundo, y el diseño de estos nuevos buques podía poner en riesgo su supremacía, ya que obligaba a empezar desde cero a todas las armadas. El temor reinante en su almirantazgo era la armada alemana, con la que empezó una auténtica carrera naval para mantener su hegemonía. Cuando una armada construía un nuevo barco monocalibre, la otra respondía de inmediato. 

CRUCEROS DE BATALLA


Al mismo tiempo que nacía del acorazado monocalibre, nacía el crucero de batalla.
Un frase que Ficher hizo célebre fue “velocidad es coraza”. Con ello quería poner de manifiesto un nuevo tipo de construcción naval. Se trataba de construir un barco que pudiera llevar montada una potencia de fuego similar a la de los acorazados, y que diera 4 o 5 nudos más. Para ello dispondrían de turbinas de vapor. Todo ello conllevaba un desplazamiento mayor, de tal modo que para evitar esto se sacrifico su coraza, aligerando de esta forma su peso. Eran barcos menos protegidos de ahí la frase que expuso Ficher. 

En 1906 Gran Bretaña puso en grada una serie de cruceros, los “Invincible”, de 20.100 toneladas, cañones de 305 mm y con una velocidad de 26 nudos, es decir, 5 más que el Dreadnought . Su protección vertical era de 152 mm y la horizontal o de cubierta, era de 19 mm, más 38 mm o 64 mm. Esta protección resultó insuficiente, así, el crucero que daba nombre a la serie fue hundido en la batalla de Jutlandia.

Ante este barco, los alemanes construyeron Von der Tann, que disponía de cañones de 280 mm, cuya protección vertical era de 280 mm y la horizontal de 70 mm, mejorando la de los ingleses. Además, hay que mencionar que la calidad del acero alemán era muy superior a la del inglés.

El último crucero de batalla construido fue el Hood en el 1920, armado con cañones de 381 mm. Contaba con una coraza de protección vertical de 305 mm a 125 mm, y la horizontal de 75 mm a 38 mm, aún siendo un modelo mejor, no pudo hacer nada al enfrentarse al acorazado Bismarck, que lo mando al fondo del océano.

Crucero de Batalla Hood.

Los cruceros de batalla americanos Lexinton, así como los japoneses Akagi, no fueron terminados como tales, debido al Tratado de Washington de 1922, y se trasformaron en portaaviones.

A raíz de este tratado, abordado en el artículo anterior, se produjeron unas "vacaciones navales" que duraron diez años, de 1922 a 1932, donde solo fue autorizada a construir acorazados la marina británica: el Nelson y el Rowney. Los británicos se comprometieron a dar de baja a los cuatro acorazados de la clase King George V, quedando la marina británica con 20 acorazados.


ACORAZADOS VELOCES, O SUPERDREADNOUGHT


Transcurridas “las vacaciones navales”, período en el cual solo se construyó la clase Nelson por parte de Gran Bretaña, todas las marinas modernizaron sus flotas. Los avances tecnológicos, se vieron reflejados principalmente en la mejora del blindaje y la velocidad.


Acorazado Negato 1919
Acorazado Negato modificado

Todos los acorazados construidos a partir de 1932 eran barcos más grandes, más armados y más rápidos. Todos ellos tenían una gran potencia que iba desde los 120.000 cv hasta los 200.000 cv. Esto hacía que navegasen a un mínimo de 26 nudos, llegando a los los 33 nudos el Iowa. El aparato motor de estos veloces acorazados era de turbinas de vapor de alta presión alimentadas por fuel oil, que ofrecían mayor potencia y hacía posible eliminar un número considerable de calderas, aliviando así el espacio en el buque.

Con respecto a la protección, su aumento fue considerable. La distancia de fuego había crecido mucho a consecuencia del uso de cañones de mayor envergadura, con lo cual las bombas caerían con mayor arco, y esto influía en la protección. Se tendía a poner una protección vertical con un ángulo de hasta 20º para que el proyectil resbalase y no rompiese su blindaje. Algunos, como los South Dakota, tenían esta protección inclinada en el interior. La protección horizontal se aumentó y se dividió en varias cubiertas acorazadas.


Blindaje South Dakota
Sección del blindaje del Yamato



La defensa anti-submarina fue la de compartimentar el buque. Esto incluía mamparos preparados para que se rompiesen e inundasen, absorbiendo de esta manera la fuerza del torpedo.
En estos modernos acorazados se instaló, en gran medida para poder ajustarse a los desplazamientos acordados en la conferencia de Washington, un nuevo concepto de protección conocido como “todo o nada”, que consistía en proteger las partes vitales del barco por una cintura fuertemente acorazada. Fuera de esta cinturón de protección, solo se protegería con una gruesa coraza la torre de mando, las torres de los cañones y las barbetas. En algunos acorazados americanos también se incluiría el aparato de gobierno.

Al mismo tiempo, su armamento también aumentaba, oscilando desde los 280 mm hasta los 460 mm que alcanzó la clase Yamato. Para el armamento secundario se optó por el diseño de torres giratorias iguales a las de la artillería principal del buque, en detrimento de las casamatas, ya que estos permitía mayor elevación del cañón y así tener mas alcance.
Se intentó el uso de cañones de doble propósito, es decir, que pudieran ser antiaéreos y de superficie, especialmente en las marinas aliadas, con no muy buenos resultados. Para el tiro antiaéreo se necesitaban cañas cortas y buena carencia de disparo, mientras que para el ataque a superficie eran precisos cañones más largos con grandes velocidades iniciales. Las marinas del Eje, optaron por usarlos separadamente.
Durante la guerra, todos los barcos de línea vieron aumentadas sus armas antiaéreas, para ello acumularon cañones en torno a su castillo.

Los avances técnicos también llegaron a las direcciones de tiro, donde fueron instalados nuevos telémetros más precisos. Y en concreto las marinas americana e inglesa, adoptaron radares que precisaban la distancia a la cual estaba el barco.

Los primeros "acorazados veloces" en entrar en servicio fueron los Deutschland, en 1931, armados con 6 cañones de 280 mm montados en dos torres triples. Se construyeron tres unidades con unas características que los hicieron únicos en la historia.

"Acorazado de bolsillo" Deutschland
El Tratado de Versalles establecía que Alemania solo podía tener barcos con un desplazamiento máximo de 10.000 toneladas, es decir, barcos con desplazamiento de crucero,  y cuyos cañones no podían superar los 280 mm. Ciñéndose a estas directrices la Kriegsmarine logro una enorme potencia de fuego sobre la plataforma máxima de que podían disponer en función de dicho tratado. Estaban propulsados por motores diésel  lo que les daba una enorme autonomía y gran funcionalidad para la guerra de corso.
No eran realmente acorazados, más bien eran cruceros acorazados, pero se les conoció con el sobre nombre de "acorazados de bolsillo", causando gran asombro en las demás armadas, e incluso algo de preocupación en la armada francesa.

Esta última respondió poniendo en grada sus nuevos acorazados Dunkerque y StrasborugEstos buques tenían toda su artillería principal en la proa, porque se suponía que perseguirían a los Deutschland en caso de conflicto. Una concepción de la guerra un tanto particular.
Con la llegada de Hitler al poder, rechazó la Paz de Versalles, y sus restricciones en cuanto a la construcción de barcos de guerra. Llegó a un acuerdo con Gran Bretaña por el cual la armada alemana podría tener hasta un 35% del desplazamiento que tuviese la británica. Este acuerdo permitió a Hitler hacer sus primeros barcos acorazados sin límites de desplazamiento, los Scharnshorst y Gneisenau, en 1935. Contaba eso sí, con cañones de 280 mm a la espera de poder montarle otros mayores, algo que nunca se llevó a cabo.
Italia, por su parte, también puso en grada acorazados nuevos, los Littorio y Vittorio Veneto, en 1934, que ya contaban con cañones de 381 mm, en contraposición a los construidos por Francia, para establecer un equilibrio de fuerzas.
Tanto los franceses como los italianos construyeron más unidades. Los italianos el  Roma, que entró en servicio cuando la guerra terminaba para Italia. Y los franceses por su parte pusieron en grada tres acorazados de la clase Richelieu en 1935. De los tres, el Richelieu fue el único que llegó a terminarse por completo. El Jean Bart, no tuvo toda su artillería, y el Clemenceau que se inicio en 1939, no se llegó a concluir.
Alemania no tenía intención de quedarse atrás, también pretendía la construcción de barcos con mayor desplazamiento, mejor coraza y más potencia de fuego. Así nació el acorazado Bismarck en 1936, probablemente el barco más famoso de la Segunda Guerra Mundial, y su gemelo el Tirpitz.
El Bismarck desplazaba 50.000 toneladas a plena carga y tenía 8 cañones de 381 mm, montados en cuatro torres dobles, dos a proa y dos a popa.
Por último, Gran Bretaña,  que poseía la flota más numerosa y más potente de Europa, inició en 1937 la clase de acorazados King George V, que comprendía a los acorazados  Prince of Wales, Duke de York, Howe y Ansow. Cada uno contaba con 10 cañones de 356 mm, 6 a proa, distribuidos en una torre cuádruple y otra doble, y los 4 restantes, en otra torre cuádruple a popa.

Acorazado North Carolina

En lo que respecta a las otras dos armadas oceánicas, ambas tuvieron una carrera muy desigual. Así, mientras la poderosa industria naval estadounidense construyó 10 grandes acorazados, la flota japonesa solo construyó 4, de los cuales uno terminaría como portaaviones acorazado, el Shinano.
Los japoneses confiaban en la potencia de sus modernos acorazados Yamato, que eran los mejor armados y mejor protegidos, con cañones de 460 mm y con una cintura acorazada de 410 mm, y más de 200 mm en su cubierta, pero tecnológicamente se encontraban muy lejos de sus contemporáneos americanos por carecer de radar y esto los desfavorecía enormemente.
Por su parte, los americanos contaban con 10 modernos acorazados, (ninguno de ellos presentes en Pearl Harbor el 7 de diciembre de 1941) provistos con 9 cañones de 406 mm, correspondientes a las clases Nort Carolina, South Dakota y Iowa. Esta última clase de acorazados no entraría en escena hasta agosto de 1943 el Iowa, y a lo largo del 1944 el New Jersey, Wisconsin, y donde sería firmada la rendición de Japón el acorazado Missouri.
Además la flota americana contaba con otros 10 acorazados del tipo Dreadnouth. Prácticamente doblaban los 12 acorazados nipones.




LISTA DE ACORAZADOS VELOCES PUESTOS EN GRADA




ALEMANIA
FRANCIA
ITALIA
   GRAN BRETAÑA
   EEUU
JAPON

1929
DEUSTCHALAND





1930






1931
ADMIRAL SHEER





1932
ADMIRAL GRAF SPEE
DUNKERQUE




1933






1934

STRASBOURG
LITORIO
V.VENETO   



1935
SCHARMHORST
GNEISENAU
RICHELIEU




1936
TIRPITZ
JEAN BART*




1937



KING GEORGE V
PRINCE  WALES
DUKE OF YORK
HOWE
ANSON
NORTH CAROLINA
1938


ROMA
IMPERO*

WASHINGTON
MUSASHI
1939






SOUTH DAKOTA
MASSACHUSSET
INDIANA

1940




ALABAMA
IOWA
NEW JERSEY
SHINANO**
1941



VANGUARD***
MISSOURI
WISCONSIN

Total
7
4
4
6
10
4


* No se llegarían a terminar. 
** Terminaría como portaaviones acorazado.
*** Se terminaría su construcción una vez finalizada la guerra